Muchas veces nos encontramos en situaciones en las que valoramos la posibilidad de acudir a un psicólogo para consultar alguna cuestión que nos tiene preocupados. Sin embargo, en muchas de esas ocasiones, termínanos descartando esa posibilidad desmotivados por las dudas sobre si realmente va a ayudar o qué psicólogo es el adecuado.

Ir al psicólogo no es sencillo, primero por los estigmas asociados a consultar a un profesional de salud mental (“No voy al psicólogo porque no estoy loco”), después por no tener muy claro en qué me puede ayudar (“No creo en la psicología”, “Para eso se lo cuento a un amigo”) o bien, en otras ocasiones, por el precio.

Esta es una realidad que nos empuja a los profesionales a tratar de dibujar aquellos escenarios en los que acudir a un especialista te puede ayudar y también a seleccionar a un profesional de garantías que pueda ofrecer sus servicios.

¿POR QUÉ IR AL PSICÓLOGO?

La mayor parte de personas que acuden al psicólogo vienen por un malestar asociado a determinados sucesos vitales que le está generando una situación de bloqueo en su vida. Dicho malestar puede estar asociado a situaciones vitales que impactan en el bienestar de las personas y que contribuyen a desarrollar problemas psicológicos.

Una pregunta recurrente entre las personas es la de «cómo saber si necesito ir a un psicólogo» Trataremos de darla respuesta definiendo lo que es un psicólogo y qué hace un terapeuta: El psicólogo es un especialista en generar espacios de trabajo que sirvan para desarrollar recursos y habilidades que faciliten responder a dichas crisis de una manera funcional.